Coach Cars Madrid: Episodio IX: Nuestro encuentro no fue una coincidencia. Nada ocurre por accidente

Este episodio pensé llamarlo "Η ιστορία του ελληνικού αυτοκινήτου", en castellano, "la historia del coche griego", puede que la historia más esperpéntica y surrealista de cuantas me han sucedido en la compra de un coche. Sirva para que alguno se salve de algún aprieto parecido algún día, aunque veo complicado que a alguien le suceda algo similar.

W116, W126 y W140

Todo comenzó un día "x" en un consultorio médico donde trasteando antes de que llegue mi turno veo un anuncio que me llama mucho la atención. Uffff, que coche más barato.. y pone que es de una embajada!. Esto huele a timo.

Llamo al teléfono que aparece y me salta un contestador en un idioma extraño, enrevesado.. es griego! A esa hora, la embajada estaba ya cerrada y la grabación (en castellano en segunda ronda) invitaba a dejar un mensaje después de la señal. Paso.

A la mañana siguiente llamo y me dicen: "es el coche del señor embajador". Qué chollazo!! Las embajadas extranjeras no tienen interés en vender coches y los ofrecen baratos para evitar molestias.

Me presento en la embajada, llamo a las megapuertas y no me abren pero una bonita cámara me apunta vigilante. Al rato aparecen dos personas que "amablemente" me preguntan el motivo de mi visita, "vengo por el anuncio del coche". Paso dentro, se une una mujer y todos juntos, con frases en griego entre ellos, nos dirigimos al garaje.

Allí me encuentro con un pedazo de Mercedes Benz S280 (W140), el más mastodóntico de todos los clase S fabricados, con bastante polvo encima (como ilustra la foto anterior) pero impecable de carrocería e interiores. Me explican que el coche ha sido el asignado al propio embajador que hace poco cambió de vehículo y que no ha dado problemas.

-"¿Lo puedo probar? No tiene matrículas..." dije yo cándidamente.

-"Me temo que no, es un coche diplomático, se le han retirado las matrículas para el nuevo coche del embajador. Solo podrá salir de aquí ya con placas provisionales españolas".

Vaya contratiempo. Nunca he comprado un coche sin probarlo pero.. esto es una embajada, y es el coche del embajador. ¿Qué peligro puede haber? :-). Apunto que todo esto transcurre a finales de 2006 y nada de lo que ocurrió después se intuía. Griegos y españoles tenemos una fama parecida pero..

Firmo, pago, salgo de allí, me voy a Hacienda y le hago sus matrículas provisionales, tasas, IVA, etc etc y con 1.400 euros menos me marcho tan contento a coger mi transatlántico.

Había tenido Audi, BMW y me falta el Merche para completar la trilogía.

Me marcho de la embajada y, sin haber recorrido más de 1 km me empiezan a saltar todas las alarmas. Luces rojas, amarillas, avisos acústicos, etc, etc.. Me bajo en un semáforo y.. reguero de agua por las calles de Madrid.

Tuve que rellenarlo varias veces y como pude llegar a casa, abatido, consternado..

A la mañana siguiente llamé a la embajada y "sorprendidos" solo pudieron ofrecerme llevarlo al concesionario Mercedes del que eran clientes, donde se me daría un trato especial pero a mí esto me iba oliendo peor.

Vuelvo allí a trancas y barrancas y en el concesionario reconocen directamente el coche del embajador por lo que entre gestos sarcásticos y sin necesidad ninguna de inspección, me dicen: CULATA, bomba del agua,y un sinfín de cosas más: 4.700 euros IVA incluido.

Aquí ya abatido es poco. Acordándome de todos los dioses y diosas griegas y de la cultura mediterránea que compartimos.

Había que salir de ésta, pensé en denunciar a la embajada lo cual equivale a denunciar a un país, imposible, y la solución la encontré en el foro de MBfaq. Rebusqué, rebusqué y me di cuenta de que en muchos de los temas se hacía referencia a un forero llamado CE3K que parecía ser, este sí, un ser mitológico entre los propietarios de Mercedes.

Le localizo y me marcho con mi trasto a verle al pueblo de Barajas. Llego allí y me encuentro a un señor mayor, con respiración dificultosa y muy delgado al que tuve que contarle toda la peripecia. Como era algo no muy habitual le hizo gracia lo de Grecia y accedió a buscar una forma de analizar el estado de la culata sin necesidad de desmontarlo todo para no arruinarme. Estaba en sus manos.. pero la verdad es que respiré.

Y así transformó el coche revisando todo, ajustando todo y cambiando bomba del agua e incluso amortiguadores delanteros por un 40% del presupuesto bonificado de la Mercedes.

Pero este coche no nació para mí y ha sido, sin duda alguna, el que más quebraderos de cabeza me dio o más que eso, llegué a pasarlo realmente mal así que aunque funcionaba, ahora ya sí, realmente bien y era un salón rodante terminé de arreglarlo estéticamente y lo vendí poniendo rumbo a Murcia donde le perdí la pista. Aquí os pongo sus últimas fotos de cómo quedó "la criatura", o debería decir "πλάσμα"