Episodio II: El despertar de la fuerza

Continúo el Capítulo I fijando la fecha aproximadamente en 1990, cuando contaba con 16 años.

Ayudado por las hormonas y mis ganas de conducir algo más que videojuegos me colaba en toda reunión de mis amigos "mayores" relacionada con coches aunque el fin fuese acercarlo a un lavadero o directamente limpiarlo a mano siguiendo las instrucciones del padre de alguno de ellos. Muy probablemente habría alguna recompensa posterior aunque solo fuesen esas vueltecillas que comenté en el capítulo anterior.

 

Pero surgió el amor! Y con la suerte además de que ella tenía dos años más que yo y un flamante carnet rosa, así que aproveché para dar tooooodas esas vueltas que en el pasado debía ir "mendigando".

 

El coche, que le prestaban sus padres para ir a la universidad, era un flamante Renault 9 rojo, no recuerdo bien la motorización ni el acabado, al cual unimos ocasionalmente el de mi padre, casi siempre parado en el garaje, y que no era otro que un Ford Orión 1.6 GL.

Así transité hasta la mayoría de edad. Unos meses antes de la misma se produjeron dos hechos importantes, el primero apuntarme a la Autoescuela Del Alamo, en pleno San Blas, donde me habían recomendado mis mayores y el segundo... tener mi primer coche, regalado por mi hermano mayor & cuñada.. el Opel Corsa TR 1.2 2puertas.

 

Opel Corsa TR 1.2 (1991-1992)

 

La verdad es que, siendo el primero, recuerdo pocas cosas de este coche, sólo que conduje con él cuando aún no debía, que el primer día le rellenamos el aceite con unos 7-8 litros y casi estalla (además de ir dejando un reguero enorme de humo blanco) y que finalmente tuve un accidente estando parado en un semáforo.

 

Los tres coches, Renault, Ford u Opel fueron fantásticos para mí. Como casi todos los coches comunes de la época no tenían apenas extras ni comodidades pero eran divertidos, sencillos y servían para moverse, relacionarse y ver mundo.

 

Continuará..

Si quieres ver más capítulos:

Episodio I: En una galaxia muy muy lejana.

Episodio III: ¿Quién es más loco: el loco o el loco que sigue al loco?

Episodio IV: Poderoso soy por la Fuerza, pero no tanto.

Episodio V: Tus ojos pueden engañarte. No confíes en ellos

Episodio VI: Una nueva esperanza

Episodio VII: Un arma noble para tiempos más civilizados

Episodio VIII: Sin duda, maravillosa la mente de un niño es

Episodio IX: Nuestro encuentro no fue una coincidencia. Nada ocurre por accidente

Episodio X: No se ofusque con este terror tecnológico que ha construido

Episodio XI: Cuando se apuesta, a la larga, siempre se pierde

Episodio XII: Soy prisionero del beso que nunca debiste haberme dado

Episodio XIII: A veces no comprendo el comportamiento humano. Sólo intento hacer mi trabajo de la forma mas eficiente